Por más desprevenidos que andemos por la vida, en algún momento nos hemos topado con el trabajo gráfico de Alejandro Magallanes (Ciudad de México, 1971). Lo más probable es que el encuentro haya sido con alguno de los numerosos carteles que ha ideado para películas, obras de teatro, festivales de poesía, conciertos y óperas, entre muchos otros.
Pero en realidad el diseño gráfico es tan sólo su faceta creativa más visible . Se ha aventurado con éxito por la poesía —específicamente por la poesía concreta—, ha experimentado con animaciones y videos; también hace esculturas, fotografías y dibuja, sobretodo dibuja, incansablemente y sin parar. Se puede decir que Alejandro Magallanes es, en esencia, un dibujante que quiere representar todo lo que ve y es, en este medio, donde vuelca el desparpajo de su visión del mundo con mayor vehemencia.
Con Siempre di nunca será la primera vez que se aventure a exponer en un museo. Para esta oportunidad, ha ideado y concebido especialmente todas las piezas que veremos en el macg. Del mismo modo, es una exposición paradigmática donde Magallanes despliega todo su intenso imaginario que discurre por un catálogo de temas y personajes en situaciones que irradian una malicia infantil e irónica, a partir de un ejercicio crítico que se desliza a través del arte popular y hasta las bellas artes… desde la realidad hasta la ficción.
La muestra presenta un nutrido conjunto de animaciones, libretas de dibujos, fotografías e instalaciones donde una serie de personajes se encuentran en escenarios que destilan el humor negro que caracteriza el trabajo de este polifacético creador, y del cual no se salva ni el propio Museo de Arte Carrillo Gil, como se pone de manifiesto en el tapete desplegado en la entrada de este edificio.
Otro de los núcleos de la exposición recoge una buena parte de su producción poética, la cual se encuadra en una línea histórica que alcanza hasta a los caligramas de Guillaume Apollinaire y Juan José Tablada: los iniciadores de la poesía visual. Estas piezas de naturaleza gráfica conforman una nutrida serie de obras basadas en juegos fonéticos, donde las palabras y las letras, en relación al espacio de la hoja en blanco, confoman unos retruécanos que también manifiestan el humor y la irreverencia que caracteriza el universo creativo de Alejandro Magallanes.
Curador: Carlos Palacios