Salgan signos a la boca
de lo que el corazón arde,
que nadie creerá el incendio
si el humo no da señales. 
Sor Juana Inés de la Cruz

Desde hace seis años, Chiquilla te quiero mapea expresiones artísticas y culturales en Latinoamérica, documentando cómo estas prácticas responden, intervienen e interactúan con los conflictos políticos y sociales contemporáneos. En esta ocasión, presentamos una cartografía de manifestaciones populares y acciones simbólicas en las que los cuerpos han ocupado el espacio público como lugar de protesta, duelo y celebración. Estas acciones dialogan con el arte contemporáneo porque comparten sus lenguajes —la performance, la instalación efímera, la apropiación visual o la intervención urbana—, pero lo hacen sin necesidad de aval institucional ni la legitimación de la figura individual del artista. 

La exposición reúne seis casos de movilización en México, Guatemala, Nicaragua, Bolivia, Chile y Argentina, presentados mediante voces que constituyen un archivero vivo de cuerpos en resistencia. Concebida como un fanzine expandido, la muestra parte de la premisa de que el cuerpo en protesta es territorio, lenguaje y expresión colectiva. El arte no sólo representa: interrumpe, amplifica y encarna demandas sociales, desplegando un archivo afectivo y político que evidencia cómo las multitudes desafían la hegemonía del Estado y reclaman la calle como espacio de acción política, donde el deseo se entrelaza con la realidad. 

Que estos objetos se encuentren hoy en un museo podría percibirse como un gesto de cooptación, pero la institución ya no funciona únicamente como contenedor de obras consagradas: puede ser un sitio en disputa, capaz de traducir y difundir relatos en conflicto. Lejos de neutralizar lo que surge en la calle, ofrece un espacio de resonancia y cuidado compartido, donde fanzines, afiches, fotografías, poesía y otros materiales alcanzan otra visibilidad. Se trata de reconocer que las prácticas de resistencia son también legados colectivos en movimiento, y que forman parte de una memoria común que nos constituye.